Llamaron a la puerta y Dianne fue a abrir.
- Hola pequeña ¿Cómo te encuentras?
-¿¡Papá!?- Dianne le abrazó con mucha fuerza y le dio un beso- ¿Qué haces aquí? Mamá dijo que te habías ido.
- Y me he ido pero me he enterado de lo que te pasa y tienes que venirte conmigo- Su padre le sonrió, había echado tanto de menos esa sonrisa.
- Mamá no va a venir, ni David ni Anne ¿Verdad?
- No pueden ellos no son iguales que tu ni que yo, ellos son normales, nosotros no somos así nosotros somos especiales.
- Me vas a explicar por que soy capaz de hacer eso?¿Tú eres igual que yo?
- Si, yo también puedo hacer lo que tu has echo con el mando y muchas cosas más que tu aprenderás en la escuela.
- ¿La escuela? ¿Dónde esta?- Dianne no quería dejar a su madre pero sabia que se tenia que ir para saber la verdad y quería estar con su padre. La voz de Bruno la sacó de sus pensamientos.
- Dianne la escuela esta a las afueras de la ciudad, tú nunca la has visto, allí es donde estoy viviendo ahora.
- ¿Eres un alumno? ¿No eres muy mayor pare eso ya?-
- ¿ Me estas llamando viejo?
- ¡Nooo!- Dianne se echó a reír necesitaba distraerse un poco.
- Soy profesor allí
- ¿Túúúú? ¿Profesor? Pero si no pegas como profesor los profesores son malos y muy serios.
- ¿ No soy serio?- Su padre se puso serio en seguida pero se notaba que tenia ganas de reírse.
- Noo.
- ¿Y tampoco soy malo?- Se puso a hacerle cosquillas a Dianne.
- Vale vale para eres muy malo y eres muuuuy serio pero por favor para.- Su padre paró- Voy arriba a por mis cosas, mamá esta terminando de ducharse, estará en su cuarto si quieres verla. - Dianne puso la mejor sonrisa que tenia y subió a hacer la maleta, su vida ya no iba a ser la misma.
Al bajar para pedirle ayuda a su padre con sus cosas vio a su madre llorando abrazándole. Dianne no quería interrumpirles, había visto lo mucho que ha sufrido su madre con la "Separación" , se volvió y empezó ha escribirle una nota a su hermano David.
A los 10 minutos su padre llamó a la puerta de su habitación y se llevó las maletas de Dianne al coche.
- ¡Adiós mamá! Te voy a echar de menos, dile a David que suba a su habitación cuando llegue, que no se te olvide mamá.
- Adiós cariño, yo se lo digo tranquila, por favor cuidate y cuida a tu padre.
- Ojalá te vuelva a ver pronto mamá, adiós - Dianne se quería ir pronto no podía llorar delante de su madre , eso le haría daño a ambas.
- Adiós.
Dianne se sentó en la parte delantera del coche junto a su padre que iba conduciendo, cuando arrancó Dianne no podía más y se puso a llorar, al cabo de unos minutos su padre empezó a hablar.
- Dianne deja de llorar no sirve de nada, te voy a explicar todo antes de que lleguemos, tenemos una hora a si que las preguntas al final ¿ De acuerdo?
- Vale.
- Somos brujos, magos o como quieras llamarnos, podemos hacer magia como las que has echo tú y mucha más que iras aprendiendo en tus nuevas clases. Vas a estar en clase con más chicos y chicas como tú, en el centro hay niños de 15 a 19 años. No todos los brujos somos buenos existe El Circulo Oscuro tendrás que aprende como luchar contra ellos, pero espero que nunca te encuentres a ninguno, y cuando estés en las clases no puedes tratarme como tu padre, soy tu profesor.
- ¿Te fuisteis de casa por culpa del Circulo Oscuro?
- Si, queda mucho todavía duermete.
- He dormido dos días seguidos y tengo sueño todavía ¿Se me pasará, verdad?
- Si, no debería tardar mucho.
- Vale.- Dianne se quedó dormida a los pocos minutos mientras observaba como pasaba el paisaje.
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